Fiti 14... Les preguntaba: ¿cómo te llamas?"

"Les preguntaba: "¿cómo te llamas?", y ellas me decían el nombre de su aldea y su casta. No tenían identidad propia", recuerda Shobha.
"No te miraban a los ojos ni te hablaban. Ni siquiera pensaban que una mujer pudiera tener inteligencia." Shobha les hacía pronunciar su nombre frente a un espejo y les decía: "¿Quién es la única persona que nunca te abandonará?", y entonces tenían que abrir una cortina y mirarse al espejo.


Fiti 13, al revés

Hola amigos fiteros, os propongo un fiti al revés..... yo digo una palabra que tiene su porqué y que para mí, desde que la escuché, significa muchas cosas.... pero... ¿qué me decís vosotros de esa palabra? ¿qué recuerdos trae a la memoria? ¿qué sensaciones? ¿qué desventuras? ¿qué pasiones? ¿qué sentimientos? ¿qué historias?... este fiti es una sola palabra... y vosotros, si queréis, podéis responder con una, dos, o mil..... el fiti 13, dice así:

"desolador"


Fiti 12... Cuando se muere alguien que nos sueña

"Cuando se muere alguien que nos sueña, según Unamuno, se muere una parte de nosotros. Yo he soñado con la revolución de las conciencias que haga posible el cambio para que los seres humanos vivan en libertad y con dignidad y ningún hombre pueda creerse que es mejor que otro. La crisis global ha sorprendido a gobiernos y banqueros, a empresas y empresarios, a capitalistas de saldo y apologistas del mercado salvaje cuya única ideología es la codicia, a timadores de medio pelo y estafadores de postín, a advenedizos sin escrúpulos que frecuentan las mesas de los poderosos. Quizás haya llegado el momento de erguirse y levantar la cabeza, de perseguir lo imposible porque está al alcance de nuestros sueños de libertad. De reafirmarnos en que otro mundo es posible. Para Proudhon, socialista utópico, revolucionario y precursor del anarquismo, ser gobernado es ser observado, inspeccionado, espiado, dirigido, regimentado, numerado, regulado, registrado, adoctrinado, controlado, revisado, estimado, valuado, censurado, ordenado... por criaturas que no tienen el derecho ni la sabiduría ni la virtud para hacerlo. Bakunin fue más lejos al afirmar que ejercer el poder corrompe, pero someterse al poder degrada. Sin embargo, el poder es una cuestión de confianza, no de amenaza, fuerza o violencia. Se trata de ejercer la libertad, no de levantar muros y encadenar la derrota cotidiana de quienes no tienen derecho porque han fracasado incluso como seres humanos y son tenidos por ilegales. La negación del ser desde la prepotencia y la mediocridad de los dictadores públicos y privados que son su lengua bífida de serpiente mantienen el encantamiento del progreso y el bienestar cuando todo es odio y corrupción. Son los encangrejados que andan para atrás. "