Pienso mil veces al día que mi vida externa e interna se basa en el trabajo de otros hombres, vivos o muertos. Siento que debo esforzarme por dar en la misma medida en que he recibido y sigo recibiendo. Me siento inclinado a la sobriedad, oprimido muchas veces por la impresión de necesitar del trabajo de los otros. Pues no me parece que las diferencias de clase puedan justificarse: en última instancia reposan en la fuerza. Y creo que una vida exterior modesta y sin pretensiones es buena para todos en cuerpo y alma.

6 Responses to "Fiti 15... Pienso mil veces al día..."
Creo que todos necesitamos del trabajo de otro, ya sea de un pintor ó de un ingeniero de telecomunicaciones. Lo bonito es eso ¿no?
Búsqueda de una coherencia
Debemos de agradecer el esfuerzo de los antepasados y esforzarnos para que nuestros hijos reciban ese legado nuestro y de ellos. Ojala las diferencias de clase puedan algun dia desaparecer.
empatía activa
Amén!
Imposible dar una respuesta concisa a este texto tan denso, repleto de ideas y conceptos tan diferentes e interesantes. Así que lo hablaremos en persona y habrá ¡debate y tomate!.
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